EL SECRETO



Hoy les voy a contar un secreto. Un secreto que tiene que ver con la vida y con la muerte. Podrán creerme o no; podrán tacharme de loca, pero ahí va.

Según su estado vital, existen tres tipos de personas: las vivas, las muertas y las medio-medio. De las dos primeras todo el mundo tiene conocimiento, pero de las que pertenecen al tercer estado, creo que soy la única que lo sabe y he decidido hoy hacerlo público para conocimiento tanto de la sociedad científica internacional como del común de los mortales.

Las personas medio-medio fluctúan entre los estados de vida y de muerte. Digamos que son gente viajera, que transita de un lado a otro por motivos diversos, normalmente ajenos a su voluntad. Gente que aún no ha dado el definitivo traspiés que le llevará a la muerte definitiva y que tiene un pie acá y otro allá.

Si uno se fija, no es difícil reconocerlos, van vestidos de melancolía. Son personas reflexivas, imbuidas de pensamiento filosófico, solitarias, meditabundas y en ocasiones parecen ajenas a lo que les rodea.

 Las personas medio-medio varían en lo que a su porcentaje de un estado o de otro se refiere. En ocasiones están 80% vivas y 20% muertas; en otros casos, los peores, las cifras se decantan a favor de la muerte.

Muchas de estas personas desconocen su situación, es posible que la mayoría de ellas, aunque cuando la balanza se decanta hacia el estado menos favorable, algunas ideas de muerte les rondan la cabeza. Es como si algo tirara de ellos hacia ese lado, no sólo su propio peso. A veces se balancean peligrosamente y algunas terminan por caer y no volver. La muerte es como una pendiente hacia la que algunos ruedan, o se dejan rodar.

Hay veces, sin embargo, en que en mitad de la caída, algunas personas tratan de levantarse y oponer resistencia, abriendo los brazos, para resultar menos aerodinámicos. Cosas de la física, como todo en esta vida. A veces tratan de arrastrarse hacia arriba, arañando la tierra si es preciso... a veces lo consiguen.

Las personas medio-medio nacen vivas, como todas, pero en algún momento, por causas ajenas a su voluntad, medio-mueren y cuando eso ocurre ya nada les sacará de ese estado en el que medio-viven, hasta que mueren del todo.

Conviene estar atentos para intentar descubrir a los medio-medio que nos rodean, que son más de los que parece. Lo dicho, se les reconoce por su melancolía. Son personas extrañas, críticas con una sociedad que no entienden del todo, o que entienden demasiado bien. Si se cruzan ustedes con un medio-medio intenten tirar de él un poquito, para que no rueden.


Ese es el secreto del domingo, 27 de abril de 2014

Tengo otros secretos, pero los dejo para más adelante...




Lagartija
Lagartija

Políticamente incorrecta. Lic. en Filosofía y CC. de la Educación. Profesora. Psicóloga. También escribo en infohispania.es

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