LA CLEPTOCRACIA ESPAÑOLA



Al bajar del coche se dieron inmediatamente cuenta de que las cosas no estaban como debieran. La puerta del jardín estaba abierta y el perro no salió a recibirles, como cada domingo por la tarde, cuando volvían de pasar el día en casa de la abuela. Quizás Carlitos, el pequeño, no cerró bien la cancela al marchar y "lobo" el pastor alemán había huido.

Pero al llegar a la puerta de la casa y encontrarla entreabierta, estaba claro que aquello había sido algo más que un descuido. Con el corazón en un puño, Carlos, el cabeza de familia, se asomó cauteloso a la vivienda. Lo que pudo ver en el recibidor y el pasillo le sobresaltó de inmediato y enseguida tuvo conciencia de que habían sido víctimas de un robo. Tras pedir a los niños que salieran a la calle en busca de "lobo", Carmen y Carlos se adentraron en la vivienda.

La recorrieron compungidos, sobresaltados, abrumados por lo que allí encontraron. Los muebles desvencijados, los enseres por el suelo y las cosas de valor desaparecidas. Se habían llevado aparatos tecnológicos, joyas, dinero, cuadros, incluso objetos decorativos que tendrían fácil venta en la calle.

La policía no tardó en llegar, tras ser avisada. Los agentes recorrieron la vivienda, tomaron huellas, hicieron fotografías y finalmente se reunieron en el jardín con la familia. El policía de mayor rango se dirigió a Carlos:
"Bien, está todo muy claroCon las pruebas que me hemos recogido de la vivienda, podemos concluir que lo que aquí ha pasado es... que han vivido ustedes por encima de sus posibilidades".
Carlos y Carmen contuvieron el aliento, se miraron entre ellos como preguntándose y volvieron a mirar al agente, con la duda y la sorpresa en sus caras. El agente les repitió, esta vez con un matiz reprobatorio en su voz:
"No tienen ustedes nada porque han vivido por encima de sus posibilidades. Está muy claro, lo vemos todos los días. A otras familias también les ocurre, llegan a sus casas y de repente no tienen nada. No han sabido administrarse y lo han perdido todo"
"Así informaremos al juzgado y es muy posible que se tomen medidas severas. Seguramente uno de ustedes, si no los dos, tendrá que perder su empleo y el otro verá su salario reducido. Tendrán que vender el coche, mudarse a una casa más pequeña o incluso ir a vivir con alguna abuela. Ya veremos qué decreta el señor juez, pero vayanse haciendo a la idea de que el resto de su vida les tocará pagar por lo que han hecho, por su irresponsabilidad. Por supuesto, se les retirará la beca de los hijos, se les empezarán a cobrar medicinas... váyanse haciendo a la idea"
Son ustedes "culpables" CULPABLES, les repite el agente que cada vez habla más alto y parece también más alto y por su boca parecen salir serpientes y otros bichos malignos, que simbólicamente les escupe y se enroscan en sus cuellos, en sus gargantas, hasta estrangularles.

Esta escena la hemos vivido todos los españoles. Hemos sufrido un robo al que el poder ha dado la vuelta, lo ha reetiquetado y nos lo ha escupido a la cara con el veredicto de CULPABILIDAD y el reproche que millones de españoles, los más inocentes, se han tragado de "vivir por encima de sus posibilidades"

Cuando unos cacos atracan un banco y vacían la caja fuerte, desde el poder no se culpa al banco de tener vacía esa caja por haber vivido por encima de sus posibilidades. A los ciudadanos nos roban y la repentina miseria nos la achacan a nosotros.

Viene el ladrón a reírse en nuestra cara:
"jajaja, por encima de vuestras posibilidades,...  jajaja...  por encima...  jajaja...  posibilidades... jajaja...
le oímos reír mientras se aleja calle arriba con un saco a la espalda en el que lleva nuestras joyas, nuestro televisor, el DVD y hasta la hucha cerdito de Carlitos.



Lagartija
Lagartija

Políticamente incorrecta. Lic. en Filosofía y CC. de la Educación. Profesora. Psicóloga. También escribo en infohispania.es

1 comentario:

  1. Por esta parte del mundo tambien hay mucha Cleptocracia!!! Bajo el nombre de Democracia..jajajaja Muy buena entrada. Saludos!

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